viernes, 7 de noviembre de 2014

MADRID, CALLEJEANDO POR EL CENTRO.


PUERTA DEL SOL, TURISTAS A PUNTO DE COMENZAR SU VIAJE CALLEJERO


Había empleado la tarde en ir al museo, al salir,
subí por la Plaza de las Cortes. 

En la entrada del Congreso se fotografíaba la gente delante de los leones. He trabajado en la zona y jamás se me ocurrió que debía hacerme una foto. Cosas de la costumbre.


Seguí por la calle arriba hasta la Puerta del Sol, 
Después entré en "Casa Mira" a comprarme un dulce, tienen el mejor turrón de España, pero a mi no me gusta, me parece demasiado empalagoso.

Llegue a la Plaza de Canalejas. Me encanta esa plaza, tienen mucho sabor antiguo sus edificios. Sigue existiendo la tienda "La Violeta" con sus bonitas "cajitas" de caramelos.


Me fijé en la obra "salomónica " que están realizando en el lugar del Banco Hispano Americano.¡Qué lástima de edificio! Le han vaciado completamente y sus paredes se mantienen valientemente sujetas por andamios, pero ya sin su contenido. Me imagino que dentro habría habido, ricos salones, lámparas,muebles  ¡lastima de edificio!


 Se convertirá en un entramado de tiendas y escaleras mecánicas, haciendo languidecer todos las demás comercios de la calle

¡Qué rollo de civilización!

La Puerta del Sol, mantiene el interés. Llena de gente que se mueve de lado a lado y de arriba abajo,como

en un hormiguero humano ocupadísimo.
 Algo desentona claramente en la plaza.¿Metro Vodafone?¡Donde quedó la tradición? ¡Con lo bonito que es, decir, metro de Sol!

Cada vez hay algo nuevo en la plaza. Ahora salen desde allí en extraños vehículos que parecen un poco espaciales, (Sega Way, creo que se llaman) grupos de turistas, subidos con sus cascos y mochilas, para distribuirse con rapidez, por las zonas más atractivas y dignas de visitar.




En mi andadura me ha gustado fotografiar antiguos comercios, de los  muchos que existen en la calle Mayor 



Pero eso  va a cambiar y mucho, la fisonomía de las calles será tomada por multinacionales y el pequeño y bonito comercio, desaparecerá. Lo anuncian los periódicos agoreros, porque una nueva ley, dentro de las miles y miles que padecemos , se pondrá en marcha el nuevo año. ¡Se acabaron los alquileres, llamados de Renta Antigua! Se cuadruplican los alquileres. los dueños de los locales, se frotan las manos. les importa poco si  el que le alquila no puede pagar y se tiene que ir, saben que en su lugar se abrirá una franquicia, que le pagará lo que pida.



 Antes de acabar en la plaza de Opera para tomar el metro, me pasé por la Plaza Mayor para tomar un bocadillo de calamares que me apetecía mucho.

Ya se que no se pueden pedir calamares en las terrazas de la plaza, porque te dan un sablazo, pero también se que en el antiguo bar La Rua, en la esquina, los ponen muy buenos y nada caros. También son especialistas en patatas bravas, que tanto gustaban a una de mis mejores amigas, pero no podía tomar las dos cosas, ya volveré...












    En Opera, ya anocheciendo encontré un puesto de castañas. Es típico de la ciudad, pero no sabía que lo que más gusta a la gente, son las mazorcas de maíz 

asadas, ¡Lo mismo están buenas!
    En el metro me dirigí al centro comercial Príncipe Pío, donde tenía cosas que comprar. Allí encontré otros puestos típicos de Madrid: churros calentitos. Me encantan, pero ya no podía más.
    Tomé mi autobús y¡a casa!

 


 ¡Una buena tarde!¡Ya me dolían los pies!



    







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2 comentarios:

  1. Amiga mía que buen recorrido, he visto con tus ojos todo lo bello y más que hay en Madrid, y tus letras llagaron a mis oídos como tu voz, ha sido doblemente grato.
    Qué bien has debido de pasarlo, y yo aquí… pisando la arena ¡no hay derecho!
    No sabes lo bien que me he sentido al leer tu post, todo lo conocido cuando lo ves con ojos de otra persona lo ves más interesante aun, y es que Madrid es mucho Madrid, y a mí me encanta, y hace mucho que no paseo por el centro, cualquier día Ángel y yo nos animamos a ver todo eso que tú has visto hoy.
    Ya veo que hasta has ido de bocadillo, a mí los calamares no me gustan, pero el ultimo que me tome en ese sitio que tú has ido fue de beicon con pimientos, y en verdad que mereció la pena hacer ese “sacrificio” de comerme un bocata tan exquisito.
    ¡Ahhh otra cosa! Yo también me hubiese comprado una cajita de violetas que tanto le gustaban a la amante del rey Alfonso XIII, y como iba a llegar a mi casa sin tomarme un chocolate con churros ¡ni de coña! Y ya viendo tus fotos también he observado en el puesto de castañas unas manzanas de caramelo ufff eso si que no me voy a casa sin comprar dos o tres, me gustan a rabiar. Encantada amiga de leerte. Un abrazo enorme.

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  2. Se me olvidaba... porfis el color del texto es muy clarito, he tenido que cambiarlo para leerlo, anda cariño, ponlo un poco más oscuro. GRACIASSSS

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